Título: Willow
«Es difícil guardar un secreto cuando lo llevas escrito por todo el cuerpo».
SINOPSIS
Los padres de Willow murieron en un trágico accidente de coche, dejándola no solo con el dolor que supone enfrentarse a una pérdida sino también con el peso de la culpabilidad: ella era quien conducía.
Ocho meses después, su hermano mayor casi no le habla, cree que sus compañeros de clase la culpan por lo ocurrido y Willow se evade del sufrimiento con el que carga marcando todo su cuerpo con las heridas del pasado. Pero cuando un chico llamado Guy descubra su secreto, nacerá una intensa relación que conseguirá sacarla de ese mundo extraño que ella misma se ha formado
Antes de comenzar a leer el libro el resumen te predispone negativamente, parece un dramón con una niña que se corta, suponemos que puede ser una niña que amaga con suicidarse pero que en realidad busca llamar la atención.
Trata un tema difícil, la automutilación y la autoculpabilidad por la muerte de unos padres, la relación entre dos hermanos después de perder a su familia y la relación con el resto de la sociedad. Lo hace de manera sensata, mostrando, sin embargo, la cruda realidad, el dolor físico que sufre para evitarse, en realidad infructuosamente, dolor emocional.
El único punto negativo, a título personal, es en el momento en el que los dos chicos comienzan a conocerse y Willow, quien se supone que es una apasionada de la literatura, que ha leído muchísimos libros y que le encantan, desprecia un genero como es la ciencia ficción.
Por lo demás el ritmo narrativo está bien, es bastante fluido y la lectura no se hace pesada, la trama, aunque es algo previsible, te invita a seguir leyendo, a meterte en la piel de la protagonista y a sufrir con ella a sentir el dolor, el amor familiar y la esperanza de un futuro mejor.